Ni siquiera han transcurrido cinco meses desde que comenzó a funcionar y los 34 niños que son atendidos en el Centro Comunitario de Rehabilitación (CCR) Infantil del Cesfam, ya ven sus resultados.
Así se refleja en los comentarios de sus madres: “Ahora que tiene 11 meses, ha logrado cosas que pensé que se iba a demorar más. Ha evolucionado super bien”, “las tías te van orientando qué es lo que tienes que hacer”, “yo no tendría los medios para darle esto a Rafael”, “esto es lo mejor que nos podría haber pasado a los sanvicentanos”.
Ellas destacan la buena acogida, la cercanía y el profesionalismo por parte del equipo, que está formado por una terapeuta ocupacional, una fonoaudióloga y un kinesiólogo; pero que también valoran no tener que trasladarse hasta Rancagua o Santiago, para que sus hijos reciban terapia, lo que implica también un alivio económico para las familias.
El proyecto, nació porque profesionales del Cesfam advirtieron la falta de oportunidades de rehabilitación para los niños y niñas de cero a 17 años, lo que los llevó a presentar un proyecto ante SENADIS (Servicio Nacional de la Discapacidad).
Para ingresar al CCR, el menor debe estar inscrito en el Cesfam o postas de la comuna, pertenecer a Fonasa+ y presentar una patología del neurodesarrollo, musculoesquelética, diagnosticada por un especialista.